Concluida la visita a la comunidad de la Colonia San Vicente de Burjassot, nos trasladamos junto con el P. José Oltra a nuestra comunidad de Monte Sión en Torrente.
Desde nuestra llegada, y dado que había puente largo, con mucha intensidad nos dedicamos a los encuentros con todo el personal del Colegio. Es así como visitamos inicialmente algunos grupos de chicos de los diferentes niveles de educación. Nos encontramos con el claustro de maestros de la Institución. Pudimos reunirnos largamente con equipo directivo del Colegio con quienes conocimos a fondo la Institución y pudimos sentir el espíritu que los mueve. Visitamos el Centro Juvenil gestionado ente la Parroquia propietaria de los locales, y la Fundación Amigó que lleva el Proyecto. Y al caer la noche, un gran encuentro con el Consejo Parroquial ampliado en donde, conocimos en detalle la marea de grupos apostólicos que componen esta comunidad parroquial, el carisma que los mueve, la identidad amigoniana que los apasiona, el amor por la congregación que los hace cercanos, el sentirse parte todos de la parroquia y del convento, como llaman la obra amigoniana toda. Algo que sobresale y llama poderosamente la atención en la Parroquia: es una comunidad parroquial movida por el motor de los religiosos, que han centrado su atención, más allá del culto, en las necesidades de las personas que componen la parroquia de más de tres mil fieles. Es centrar la presencia fundante de Dios en el ser humano, especialmente en los crucificados, haciendo del templo el lugar de la gran celebración de ese encuentro humano divino.
Con la comunidad de hermanos, P. Javier López, superior y párroco; P. José Deusa en el júbilo de su muchos años de servicio parroquial y al colegio; P. Daniel Escamilla, jubilado y quien aún sirve a la parroquia; P. Enrique Tortajada quien colabora con la parroquia y el Centro Juvenil; P. Juan Manuel González, vicario y mano derecha del párroco; Fr. Antonio Faus, jubilado, exdirector del colegio y ecónomo de la comunidad; Fr. Rafael Yagüe responsable y coordinador de los programas de la Fundación Amigó para la Comunidad Valenciana, con todos ellos nos encontramos como comunidad y presentamos el Documento de la Visita, Despertad el Mundo, centrando nuestra conversación en la relación personal de cada hermano con el Señor y la relación de cada hermano con sus hermanos de comunidad.
Junto con Fr. Rafael fuimos a visitar los Centros que la Fundación Amigó tiene en Alicante, ciudad a 170 kilómetros de Torrente; sorprende cómo los laicos que se han apropiado de espíritu y carisma, y desde esa identidad trabajan en lugares en donde, la Congregación no está presente con sus comunidades de consagrados, lo que indica que el carisma es de la Iglesia y se posa en quien quiera recibirlo. Obras llevadas allí que atienden el dolor de comunidades de niños en estado de indefensión y abandono y de adolescentes con problemas intrafamiliares.
Estando en Torrente, participamos de la Celebración de los 125 años de la Declaración de Venerable de nuestro Padre Fundador, en Masamagrell, invitados por nuestras hermanas. Un buen número de hermanos de le región estuvimos presentes; escuchamos la conferencia de la hermana Amparo Alejos acerca de las virtudes del Padre Fundador y luego concelebramos la solemne Eucaristía festiva, concluyendo con una ofrenda floral en la plazoleta al lado del Colegio Sagrada Familia y Parroquia de Masamagrell.
Visitamos las dos obras que la Fundación Amigó tiene en Torrent, un piso de emancipación para cinco chicos extranjeros y egresados nuestros y el Centro que acogerá la formación para el trabajo y que proporcionará un empleo digno a muchos jóvenes egresados de nuestros programas y otros. Un proyecto de mucha actualidad y mayor futuro. También el programa que la Fundación tiene en Paterna fue visitado por los hermanos.
Es de notar que durante nuestra estadía en Torrente, estuvo también Fr. Elvin Lantigua, superior y director en la comunidad de San Cristóbal en República Dominicana, quien durante un buen período pasa por nuestras casas en España, promoviendo la solidaridad con esa obra nuestra, desde un Proyecto de Solidaridad que promueve la Fundación Amigó y que este año tiene como lema: “Vamos Juntos, yo te acompaño”.
El domingo 15 de octubre, fiesta de Santa Teresa, celebramos la Eucaristía de la 10.30 con toda la comunidad parroquial. El Templo estaba lleno y concelebramos 4 sacerdotes y un diácono. En esta celebración nuestro hermano Fr. Sosthène Auguste Ayegbe Mousso, de la Comunidad Amigó Doumè de Abidjan en Costa de Marfil, recibió los ministerios de lectorado y acolitado, en su camino hacia el sacerdocio.
Agradecemos a los hermanos, a la comunidad toda, a la Parroquia y Colegio la acogida recibida en nuestra visita. Da gusto sentir una comunidad con tanta vitalidad, una familia amigoniana trabajando en unidad y sin distingos de grupos; una acción pastoral en el colegio y la parroquia centrada en las personas y una comunidad parroquial con un alto sentimiento de identidad amigoniana.